Un día me gustará hacer una disección más exhaustiva de cómo se configura la imagen de lo que estamos buscando (en internet), a través de los que se nos muestra como resultado a una búsqueda. Hoy sólo quería referenciar unos vídeos amateurs, colgados en YouTube por ciudadanos de la mayor capital catalana, Barcelona. Son personas que denuncian ciertas irregularidades en el mantenimiento de la ciudad, evidenciando el descuido de la limpieza y el desorden urbano.
Me llaman la atención porque siempre he encontrado curioso el hecho de que uno critique su propio hábitat o colectivo públicamente, como si los demás -viéndolo/oyéndolo- vayan a poner remedio. Sería como el acto de criticar a los cuatro vientos sobre su propia empresa, no dejando títere con cabeza (El Ayuntamiento de Barcelona promociona el incivismo o La mierda en las calles de Barcelona).
Las dos prácticas no llevan a nada, sino que crean un efecto exponencial negativo sobre sí mismo y la propia organización, sin remediar el problema.
¿No sería mejor intentar solucionarlo tomando parte al asunto, proactiva y constructivamente, de alguna manera?