El coste de oportunidad digital
Aún quedan muchas empresas sin una estrategia de presencia sólida en Internet. Demasiadas. Tener abiertos distintos perfiles en redes sociales sin objetivos claros sigue siendo una constante en muchas marcas. A corto plazo, corren el peligro de ser invisibles (no ser encontradas) ante sus clientes potenciales, e irrelevantes (sin discurso) ante otras marcas, quizá con peor posicionamiento pero mayor reconocimiento en el ámbito digital y que cumplen con sus objetivos: estar más al lado de sus consumidores, ganar posiciones de mercado, vender más.. A largo plazo, evidenciaran una presencia joven, carente de experiencia, y que afectará a la percepción, y el posicionamento de su sector, de su reputación online.
A estas alturas, ya queda lejos el debate de si había que estar o no estar entre las conversaciones de tus públicos objetivo. Según fuentes de Internet World Stats y Pew Research, a finales de 2013, el 90% del total de usuarios de Internet (segmento 18-29 años) era también usuario de redes sociales, mientras que el segmento de 30-49 años no para de crecer.
Por lo que cualquier marca o negocio que necesite de contacto con sus consumidores para dar salida a sus productos o servicios, las redes sociales son un lugar donde (dicho de forma coloquial) está la gente. Las personas acuden a pasar cada vez más tiempo. Es donde se discuten las fortalezas y debilidades de tus productos o los de tu competencia. Es donde se toman decisiones de compra. El coste de oportunidad que supone no tener una estrategia de presencia y objetivos claros bien definida es muy elevado. Mucho más incluso que la inversión que requiere.