Y no será en mucho tiempo.. El motivo no es ni mucho menos ‘fotográfico’, sino de una necesidad de volver a tener nuestra propia privacidad personal a salvo..
Hablándolo con un desarrollador de apps, tanto de plataformas iOS (iPhone) como Android, me contaba los peligros que corremos como usuarios de programas con los que hemos intimado y dado todos los permisos posibles y por haber para que puedan escudriñar dentro de nuestro smartphone.
El caso concreto que me gustaría compartir es el enorme peligro que corremos al dar permiso a aplicaciones cuyos usos directos o indirectos a los que nos piden. Es decir, por ejemplo: cuando un programa de mensajería instantánea nos pide permiso para acceder a nuestro carrete fotográfico, entendemos que es para que cuando queramos mandarle una foto a uno de nuestros contactos pueda hacerlo. Pero no pensamos que ese permiso está vigente siempre. También cuando no usamos activamente la aplicación. En ese momento también tiene permiso (dado por nosotros) de acceder a nuestro carrete y analizar (y por qué no enviar sin que lo sepamos) información sobre nuestras fotos a su base de datos.. puede hacerlo. Repito: le hemos dado permiso al instalar.
Y no sólo en una app de mensajería instantánea, sino en cualquier aplicación móvil que nos pida permiso para acceder a nuestra ubicación, lista de contactos u otras informaciones de carácter privado. Nos lo pedirá focalizándolo sobre un uso concreto, pero la aplicación podrá acceder a ese servicio cuantas veces quiera y para lo que quiera.
No quiero alarmar a nadie sobre el uso de aplicaciones en su móvil, solo alertar y extremar precauciones en las aplicaciones que descargamos, las que usamos y los permisos que les damos.
Aunque, como manera de asegurarse la privacidad total sin excepciones, siempre podemos volver a la máquina de fotos digital sin conexión a la red, con su función principal bien desarrollada: la de fotografiar. Nada más. Sin comparticiones ni publicaciones con o sin permiso de alguien. No da problemas. No cuenta nada a nadie. No envía nada. Sólo guarda tus fotos en su memoria para ser guardadas bajo control. Fin del problema 🙂
Mi post sobre que el vicepresidente de Google aconseje imprimir las fotos… http://t.co/nU9p51HX32 pic.twitter.com/WxN1DEkyMr
— Libey Albert (@Libey) February 17, 2015